¿Qué vemos en esta obra?
- La dama: una elegante dama con un lujoso abrigo amarillo forrado de piel está sentada a una mesa. Su mirada parece insegura, con una mano en la barbilla, lo que puede ser un gesto de duda o vacilación. ¿Se ha visto sorprendida por la repentina entrada de la criada? La carta que está escribiendo está a medio terminar. En su oreja izquierda cuelga una impresionante perla en forma de gota, una joya que estaba de moda en el tercer cuarto del siglo XVII. Probablemente, debido a su elevado precio, no se trate de una perla auténtica, sino de una imitación de cristal, fabricada por los sopladores de vidrio venecianos*.
- La criada: la criada, con un modesto traje gris y un delantal azul, está ligeramente detrás de su señora. Está inclinada hacia delante y parece estar entregándole una carta a la dama. Su mirada es cariñosa, pero también preocupada. La presencia de la criada subraya el papel de la sirvienta como persona de confianza y, posiblemente, como mensajera en asuntos amorosos para las damas adineradas.
- La carta: el cuadro entra en la categoría de los «cuadros de cartas» de Vermeer y se centra en los asuntos amorosos. En total, Vermeer pintó seis cuadros en los que las cartas son el tema principal. También en esta obra, la carta es el centro de la tensión; las emociones de la dama sugieren que el contenido de la carta puede ser inquietante, lo que refleja las incertidumbres del amor en aquella época. ¿Acaba de llegar la carta o la dama envía a la criada a entregarla? ¿Quién sabe
- Composición y luz: Vermeer crea un momento tenso y psicológico. El uso intenso de los colores amarillo y azul ultramar es típico de Vermeer. La composición es ordenada, pero las expresiones y la carta crean una sensación de drama e incertidumbre. La luz resalta los rostros y las texturas de los tejidos. En el catálogo del Rijksmuseum que acompaña a la exposición de Vermeer de 2023 se puede leer que una investigación del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York ha demostrado que Vermeer inicialmente había colocado un tapiz detallado con cuatro grandes figuras en la pared detrás de las mujeres. Mientras pintaba, lo sustituyó por un escenario oscuro con una cortina corrida hacia la derecha*.

Dama y criada, The Frick Collection, New York
La obra es uno de sus famosos cuadros costumbristas que reflejan el ambiente íntimo de la vida doméstica holandesa del siglo XVII. «Dama y criada» muestra también la maestría de Johannes Vermeer a la hora de captar emociones intensas y fugaces y un diálogo íntimo entre las figuras representadas, que sigue intrigando.
*Fuente: Vermeer - catálogo del Rijksmuseum 2023
